Arquitecta / Oficina Técnica / Capacitadora

Cecilia Ingénito

Cecilia es arquitecta, graduada de la UBA, donde da clases de Práctica y Organización de Obra. Es Jefa de Oficina técnica y Coordinadora de Proyectos en Riva S.A. y da cursos de capacitación en la Escuela de Gestión de la Cámara Argentina de la Construcción.

“La construcción es una gran escuela. No tenés porqué saber todo. Para eso tenés muy buenos compañeros.”

¿Qué camino educativo recorrió desde la secundaria hasta acá?

Estudié arquitectura en UBA, hice cursos para capacitarme en la Cámara Argentina de la Construcción y en la facultad, siendo ya arquitecta.

¿Cómo es un día en su trabajo?

Bueno. En realidad, todos los días son diferentes. Se podría resumir en que debo llegar y recorrer la obra; ver qué necesitan, si es que falta algo; luego, más trabajo administrativo. Este puede ser, atender a proveedores, analizar contratos nuevos, aprobar facturas, hacer pedidos a depósito, compras. También, atender a jefes, reuniones, dirección de obra. Lo primero y principal, al llegar, es saber qué gente tenés. Si falta algún subcontratista, comunicarse para averiguar porqué no llegó, y recorrer la obra.

¿Cuál es su parte favorita en el trabajo?

Si bien soy parte de la jefatura de obra, estoy más avocada a lo que es coordinación de proyecto, contratos y relación con el cliente. Mi parte favorita en este momento es encontrar qué y cómo presentar, hacer análisis de lo que se contrató y de lo que no, análisis interno de costos. Estoy más con los números, análisis y gestión.

¿Por qué eligió trabajar en la construcción?

Desde joven noté dos perfiles en los arquitectos. El del proyecto y el que construye. Y desde la facultad me di cuenta de que era eso lo que me gustaba. Por eso, si bien cuando era estudiante trabajé en estudios, al recibirme busqué empresas constructoras.

¿Qué le dirías a tu “yo” de 20 años?

Le diría que se relaje un poco, que aproveche más algunas cosas, que le preste más atención a otras y que escuche más a algunos profesores, tanto en el colegio y como en la facultad. Veía cosas que creía importantes que ahora me doy cuenta que no son tan así. En otro temas, que aproveche, uno a veces no se da cuenta lo que tiene, como la posibilidad de ir a la facultad, de tener ciertos profesores y compañeros. Le diría que le dé menos importancia a llegar con todo a las entregas. Que sea el proyecto el que hable. Que deje de preocuparse menos si la nota no era la esperada, eso es sólo una nota. Que se preocupe menos si le fue mal en un examen o no, no son más que exámenes. Y, finalmente, que no falte a ciertas clases y preste más atención a determinados profesores.

¿Cuáles son sus planes de futuro en tu carrera?

Me encanta trabajar en obra. Tal vez en un futuro me veo más en la dirección de obras, o algún trabajo más estructurado en cuanto horario para poder coordinar lo que tanto me gusta hacer y mi vida en familia. En un más largo plazo, volvería a coordinación.

¿Qué le dirías a alguien que quiere trabajar en la construcción?

Que se anime. La construcción es una gran escuela. No sólo en lo académico sino con la gente. Tiene mucha relación con el otro. Que se anime.

¿Tiene algún cable a tierra?

Dar clases en la facultad regularmente y, a veces, en la Cámara Argentina de la Construcción.

¿Algo que quieras compartir que inspire a otros en su recorrido profesional?

En el recorrido profesional del arquitecto, del ingeniero y las ramas del ejercicio de la construcción, tenemos que trabajar con mucho ahínco, empeño y rigor. La formación se ha ido llevando a ser, en su gran mayoría sobre el diseño, dejando poco para el aprendizaje técnico. Y el ejercicio profesional y la evaluación que hace la sociedad sobre el desempeño de un ingeniero, las fallas que tenemos dentro de los manejos de contratos, de costos, de calidad, de plazos y de siniestralidad, todas son del área técnica. El desarrollo de la construcción, que es esperable de aquí a veinte años, requiere más trabajos vinculados con las cuestiones tecnológicas. La clave está en hacer lo que a uno le guste y dar lo máximo en todo momento.